COMENTARIOS DE CAMPAÑA
A lo largo de las últimas semanas, se ha ido extendiendo la idea de que los electores podemos acudir a las urnas, inutilizar con una gran X (tache, ¿no?) cada una de las boletas electorales, inutilizándolas, o bien las podemos dejar en blanco con la misma consecuencia de aportar un voto por nadie, y en contra de un sistema político fracasado.
Esto desató a todos los comentaristas al servicio del gobierno, o de los “partidos políticos”, o del IFE, como si se hubiera dado la alarma de que los agarren sin calzones y los exhibamos ante el mundo como son: inútiles, corruptos y mentirosos.
Yo quiero hacer una aclaración personal acerca de mi postura. No me importa a quien favorezco si inutilizo mi voto. Será un voto en contra de las pandillas de rateros que nos explotan, para ser continuado con las siguientes propuestas:
- Que se termine el subsidio a todos los partidos políticos.
- Que se prohiba que haya “comisionados” en plazas gubernamentales que trabajen con los partidos, o con los sindicatos, o en la casa del jefe, o en el taxi del que manda en la oficina.
- Que ningún sindicato tenga pertenencia a ningún partido político. En tanto que representante de trabajadores, que funcione como tal, emplee y PAGUE a su propio personal y reconozca la libertad de cada trabajador para que pertenezca a un partido o no, y pueda votar sin presiones.
- Que los diputados y senadores trabajen 300 días al año, redactando leyes, estudiándolas y auscultando a los que sí saben de los temas para que no se las den de saber de todo. Si faltan a sus labores sin justificación, que se les descuente el día.
- Que se elimine el fuero de los legisladores. Si la riegan, que lo enfrenten sin esconderse.
Estas son las primeras, y se ha de notar, si el lector lo piensa tantito, que son el comienzo de una rendición de cuentas que debe durar todo en trienio, o todo el sexenio, o toda la vida de los ciudadanos que, en última instancia, somos los patrones de los que llegan por elección a un puesto. La democracia es, después de todo, el gobierno del pueblo. Si queremos democracia, todos los ciudadanos somos patrones y debemos reclamar cuando lo que se ofrece no se cumple.
MI VOTO, EN BLANCO O TACHADO, ES UNA PROTESTA CONTRA UN EJERCICIO POLÍTICO INEPTO, INÚTIL Y TRAMPOSO.
1 comments:
No me queda claro aún cómo utilizar mi voto el próximo domingo. Quisiera saber que realmente sirva de algo.
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